Espectros del capital
Espectros del capital Fuente: Pexels Paisajes fantasmagóricos se proyectan en el horizonte. Lo espeluznante se solía ver en el paisaje no humano, en lo inerte. Las mil formas naturales cubrían normalmente la retina manchada por aquel horizonte inhóspito, donde mares, selvas y prados se extendían opacamente. El relámpago iluminaba el oscuro cielo, manchado únicamente por el tenue pero sublime brillo de las estrellas. Pero lo sobrecogedor también puede estar en nosotros mismos, pues puede que no seamos, tanto como solemos pensar, una parte diferenciada de aquella sustancia spinozista que sobrepasa todo nuestro entendimiento e individualidad. La cercanía de lo lejano, así definía Georg Simmel la sensación que teníamos cuando nos enfrentábamos a una figura extraña. ¿Y no será eso el sentimiento más generalizado en el sujeto actual? La alienación más profunda, la marea más autómata que nunca del capitalismo; zarandeando nuestra existencia al son de la densidad de una luna espectra...